Los estudios llevados a cabo sobre ciertas especies de tibur≤n indican que el cerebro de algunos tiburones puede ser de gran tama±o. En proporci≤n al peso corporal, el cerebro del tibur≤n es tan grande como el de muchos pßjaros y mamφferos, que disponen de los cerebros de mayor tama±o y muestran la conducta mßs compleja.
La anatomφa del cerebro de los tiburones varφa de unas especies a otras, pero siempre consta de bulbo raquφdeo, cerebelo, mesencΘfalo y telencΘfalo. La mayor parte del cerebro recibe y coordina informaci≤n sensorial. El bulbo raquφdeo procesa ~estφmulos~ auditivos e informaci≤n procedente de la ~lφnea lateral~ y de los ~electrorreceptores~ del tibur≤n.
El cerebelo, que constituye un cuarto del tama±o total del cerebro, controla la coordinaci≤n de los m·sculos y los reflejos, y es el responsable de la mayor parte del comportamiento instintivo del tibur≤n. El mesencΘfalo procesa informaci≤n visual.
Por otro lado, el telencΘfalo integra la informaci≤n ~olfativa~ y, probablemente, controla tambiΘn el pensamiento y la memoria. Se ha demostrado que los tiburones son capaces de aprender y recordar. Por ejemplo, se ha condicionado a los tiburones galanos para presionar una diana y hacer sonar la campana a fin de recibir comida en un lugar distinto al de la diana. Asimismo, se ha entrenado a otros tiburones para que recogieran anillos con el ~hocico~ y ser recompensados con comida. No estß claro todavφa si este entrenamiento afecta a la conducta de los tiburones en su entorno natural, o de quΘ forma en caso de hacerlo.
