JARDINES DE HESPÉRIDES Jardín en que se encontraba un manzano que hacía frutos de oro y que era vigilado por algunas Ninfas. Heracle tenía que tomar estas manzanas durante uno de sus trabajos y pidió a Atlante que fuese en su vez, ofreciéndose a soportar el Cielo sobre sus hombros. Cuando Atlante volvió no quiso tomar el peso otra vez, entonces Heracle le pidió que lo sujetara sólo por un momento más, mientras que él se colocaba un poco mejor. Atlante cayó en la trampa y Heracle se fue con las manzanas.