La ilustración artística de nuestra casa, el planeta tierra, se hizo gracias a las imágenes enviadas por satélites.
La magia de los computadores permitió armar un gran rompecabezas, que nos deja apreciarla tal como se vería
desde un cielo sin nubes.
La tierra es una sola. Las fronteras políticas no se ven desde el espacio, pero los colores de los biomas, o
grandes zonas de vida, sí se marcan nítidamente.
El verde corresponde a bosques y praderas; los tonos naranja y amarillo claro, a los desiertos y zonas áridas; el
blanco, a los hielos. Pero sobre todos los colores, destaca por su extensión el de los océanos. Es por ello que,
entre los demás planetas del sistema solar, nuestra casa es llamada "El Planeta Azul".
Examinemos en detalle este mapamundi físico, preguntándonos acerca de la distribución de las zonas de vida,
aquí como manchas de color. Pensemos su relación con el clima, los vientos y montañas, la rotación de la tierra
y la historia de los continentes.
*GAIA, "La madre tierra", ha creado condiciones para la vida, incluida la del hombre. En este horizonte de
colores y escenarios, en un permanente proceso de cambio, la vida crea paisajes y a su vez es presionada para
moldearse a las exigencias del medio.
*GAIA, nombre del planeta Tierra como organismo vivo, según la hipótesis de Jim Lovelock (1972) y antiguo
nombre griego de la deidad "tierra".