Marbelle bate récords | ||
Por: Francisco Quintero (REDACTOR DE EL ESPECTADOR) El nombre de Mauren Belky Ramírez no dice nada a nadie. Ni siquiera a sus padres, un policía boyacense del Club de Agentes de la 68 con avenida El Dorado, en Bogotá, y la modista caldense María Isbed. Pero Marbelle, la niña que desde julio pasado enloquece a los hombres consus tecnocarrileras llenas de frases fuertes y poses provocadoras, sí. Hoy no hay fenómeno musical igual en América Latina. La encantadora caleñita de escasos 16 años,1,65 de estatura y 52 kilos de peso, cuyo derriére lució para el calendario Rexona 1996, es la cantante más taquillera de Colombia de los últimos tiempos. Según Sonolux, la disquera de sus derechos, en sólo cuatro meses ha vendido medio millón de copias. Es la menor de tres hermanos y dos hermanas, del popular barrio Santa Elena, en Cali, y responsable de un aire juvenil de una música antes considerada exclusiva de viejos verdes y despechados. Los nuevos aires no sólo provienen de sonidos sintetizados sino de las atrevidas vestimentas -diseñadas por su propia madre-, los tatuajes y el piercing, en nada comparables a las faldas ‘mataemociones’ de Las Hermanitas Calle. En E.U y México, donde el 14 de octubre emprenderá una gira promocional por la región tejana, Miami y Los Ángeles, la llaman la Selene colombiana, en memoria de la cantante chicana asesinada en 1994, famosa por sus interpretaciones de música norteña. Collar de perlas, una canción de letras fuertes, ocupa los primeros lugares en estaciones de Ecuador, donde hoy domingo, y hasta el jueves, se ganará un buen fajo de dólares. Pero su verdadero escenario han sido los antiguos territorios nacionales. Marbelle, quien abandonó el segundo de bachillerato del colegio Nuestra Señora de Fátima, en Bogotá, para dedicarse de lleno a cantar, abarrota cada fin de semana coliseos y gramillas de fútbol. Con sus 10 músicos en escenario, siete técnicos y su inseparable madre, no hay semana que no tome un vuelo de la estatal aérea Satena, a plena selva. Polémica Ante este fenómeno musica, el país se encuentra dividido. No
sólo por el desabrochado lenguaje de sus canciones (ver
recuadro) sino porque algunos opinan que Marbelle es una niña
convertida en objeto sexual. De hecho, aunque a sus conciertos
también van menores, últimamente están siendo programados a
altas horas de la noche para que sólo ingresen adultos. Adultos
divertidos por una menor de edad, es la paradoja. |
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