November 5, 1997
(In English)
Hobart, Australia. El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) hizo hoy un llamado para detener la pesca de altura del
Pez Dentado de la Patagonia, hasta que se pongan en funcionamiento mejores prácticas de manejo y se tomen medidas para detener la cada vez mayor
captura de esta especie comercial.
Las nuevas evidencias de que está ocurriendo esa pesca ilegal fueron dadas a conocer la semana pasada, durante la reunión del comité
científico de la Convención para la Conservación de los Recursos Marinos de la Antártida (CCRMA), que comenzó en
Australia el 27 de octubre. Los científicos estiman que, durante el año pasado, más de 80 barcos participaron en capturas ilegales o no
reguladas que fueron avaluadas en más de 200 millones de dólares norteamericanos. La pesca ilegal está estimada en unas 100 mil
toneladas; la legal sólo permite una cantidad menor a las 13 mil toneladas.
"La piratería moderna vive y vive bien; de hecho, la pesca no regulada del altamente valorado Pez Dentado de la Patagonia está alcanzando
niveles verdaderamente alarmantes", dijo Margaret Moore, directora de programas de conservación de WWF Australia. "El Fondo Mundial para la
Naturaleza, no obstante, aplaude las recientes acciones tomadas por el gobierno australiano al tratar con dureza la pesca ilegal, pero esto no es
suficiente. Las naciones miembros de la CCRMA deben ahora conseguir el cierre de todas las pesquerías de pez dentado en alta mar, hasta que se pongan
en práctica medidas adecuadas que permitan su aprovechamiento racional".
Esta especie de pez prefiere las aguas profundas, vive muchos años y, hasta los momentos, es poco conocido por la ciencia. En casos como éste,
WWF cree que se deben imponer límites a la captura mientras los científicos descubren las dinámicas de población de la especie.
"Esta temporada no regulada de pesca del pez dentado ilustra por qué necesitamos del nuevo tratado entre los gobiernos que pescan en alta
mar", dijo Michael Sutton, director de la Campaña "Mares en Peligro" de WWF. El tratado, conocido el Acuerdo de las Naciones Unidas
sobre los Stocks de Pesca con Redes y Stocks de Peces de Alta Migración (UN agreement on Straddling Fish Stocks and Highly Migratory Fish Stocks, en
inglés) fue negociado en 1995, pero aún no ha sido puesto en práctica pues necesita la ratificación de 30 países.
"Una vez que el tratado tenga un suficiente apoyo de países, los cuerpos regionales de manejo, como el CCRMA, tendrán mayor poder para
negociar con las naciones que practiquen la piratería moderna", añadió.
Otros temas que fueron tomados en cuenta por el CCRMA, cuyas sesiones terminarán esta semana, incluyen los impactos de la pesca de línea en
las aves y otras especies marinas. Estas líneas, usadas para pescar peces dentados, son responsables de la muerte a gran escala de pájaros
marinos. Se estima que las pesquerías ilegales de este pez matan entre 45 mil y 145 aves, incluyendo los, ya en peligro de extinción, albatros
y petreles.
CCRMA tiene 23 estados-miembro que mantienen intereses pesqueros en la región. Ayuda a prevenir la sobre explotación de peces y krill en el
Océano del Sur, además de prevenir los impactos dañinos que pueda tener la pesca en todos los ecosistemas marinos de la
Antártida. (Traducción: Juan Ignacio Cortiñas S. FUDENA)
Contacto:
Someshwar Singh en WWF Internacional: +41 22 364 9553.